Natural Terapias Tipos de Movimiento Articular
El cuerpo humano es una maravillosa estructura en constante movimiento. La capacidad para movernos depende en gran medida de las articulaciones, que son las conexiones entre los huesos que permiten la movilidad y flexibilidad. Comprender los tipos de movimiento articular no solo es fundamental para profesionales en salud y terapias naturales, sino también para cualquier persona interesada en mejorar su bienestar físico y prevenir lesiones.
En este artículo exploraremos en profundidad los distintos tipos de movimientos que realizan nuestras articulaciones, sus características, y la importancia de mantenerlas saludables mediante terapias naturales y técnicas manuales. Conocer cómo funcionan estos movimientos será clave para aprovechar al máximo cualquier práctica de osteopatía, fisioterapia o ejercicios terapéuticos.
¿Qué es una articulación?
Las articulaciones son estructuras que conectan dos o más huesos y permiten la movilidad del esqueleto. Además, proporcionan estabilidad y fuerza para soportar las diferentes cargas y movimientos del cuerpo.
Cada articulación está formada por:
- Superficies articulares: Recubiertas de cartílago para facilitar el deslizamiento y amortiguar impactos.
- Cápsula articular: Envuelve la articulación y la mantiene unida, aportando protección.
- Líquido sinovial: Lubrica las superficies para facilitar el movimiento sin fricción.
- Ligamentos: Estructuras fibrosas que refuerzan la articulación y limitan movimientos extremos.
- Músculos y tendones: Impulsan el movimiento y estabilizan la articulación.
El conjunto de estos elementos permite que nuestras articulaciones tengan un rango de movimiento definido, que variará según el tipo de articulación.
Clasificación de las articulaciones según su movimiento
Desde un punto de vista funcional, las articulaciones se clasifican en 3 grandes grupos según el tipo y el grado de movimiento que permiten:
- Articulaciones sinartrosis (inmóviles): Estas no permiten movimiento alguno, como las suturas del cráneo.
- Articulaciones anfiartrosis (semimóviles): Permiten un movimiento limitado, como las vértebras.
- Articulaciones diartrosis (móviles): Son las que permiten amplia movilidad y son las más comunes en las extremidades.
Nos centraremos en las articulaciones diartrosis, pues son las que realizan los movimientos articulares dinámicos que utilizamos cotidianamente y los que más interés tienen para terapias naturales, osteopatía y masaje terapéutico.
Tipos básicos de movimiento articular
Los movimientos articulares son el resultado de la contracción muscular que actúa sobre las articulaciones diartrosis. Cada tipo de movimiento tiene características propias y está condicionado por la estructura anatómica de la articulación y los tejidos que la rodean.
A continuación, presentamos los movimientos principales que puede realizar una articulación móvil:
1. Flexión y extensión
Flexión es el movimiento que disminuye el ángulo entre dos huesos. Por ejemplo, cuando doblas el codo o la rodilla, acercando el antebrazo o la pierna al brazo o al muslo.
Extensión es el movimiento contrario, que aumenta el ángulo entre dos huesos, como cuando estiras el brazo o la pierna.
- Importancia: Esos movimientos son fundamentales para actividades diarias tales como levantar objetos, caminar, o realizar ejercicios.
- Ejemplo: Flexionar la muñeca para tomar un vaso y extenderla para soltarlo.
2. Abducción y aducción
La abducción es el movimiento de separación de una extremidad o parte del cuerpo respecto a la línea media. Por ejemplo, levantar el brazo hacia un lado alejándolo del cuerpo.
La aducción es el movimiento opuesto, acercar una parte o extremidad hacia la línea media del cuerpo.
- Son movimientos básicos para actividades como salir del vehículo, abrazar o mover las piernas para cambiar de posición.
3. Rotación
La rotación implica girar un hueso alrededor de su propio eje longitudinal. Puede ser interna (hacia adentro) o externa (hacia afuera).
Este movimiento es frecuente en articulaciones como la cadera, el cuello (cervicales) y el hombro.
- Ejemplo: Girar la cabeza para mirar hacia los lados.
- Importancia: Fundamental para la movilidad de la columna y las extremidades.
4. Circunducción
La circunducción es un movimiento complejo que combina flexión, extensión, abducción y aducción, generando un movimiento circular de un segmento del cuerpo.
Es común en articulaciones esféricas como el hombro y la cadera.
- Ejemplo: Mover el brazo en círculos amplios.
5. Supinación y pronación
Estos movimientos permiten girar la mano y el antebrazo.
- Supinación: Girar la mano hacia arriba o hacia adelante (posición anatómica).
- Pronación: Girar la mano hacia abajo o hacia atrás.
Son movimientos cruciales para la funcionalidad manual en actividades cotidianas.
6. Inversión y eversión
Movimientos que describen la inclinación del pie.
- Inversión: Movimiento de girar la planta del pie hacia adentro.
- Eversión: Movimiento de girar la planta del pie hacia afuera.
Importantes para mantener el equilibrio y adaptarse a superficies irregulares.
Clasificación según la forma de la articulación
El rango y tipo de movimiento está condicionado también por la morfología articular. Existen diferentes tipos de articulaciones diartrosis que permiten distintos tipos de movimientos:
1. Articulaciones en bisagra (ginglimo)
Permiten movimientos de flexión y extensión. Ejemplos:
- Codo
- Rodilla
- Dedos
Estas articulaciones funcionan como una bisagra, abriendo y cerrando el ángulo entre huesos.
2. Articulaciones en pivote
Permiten la rotación sobre un eje. Ejemplo destacado:
- Articulación atlantoaxial (entre las primeras vértebras cervicales), que permite girar la cabeza.
3. Articulaciones en silla de montar
Permiten múltiples movimientos (flexión, extensión, abducción, aducción y circunducción). Ejemplo:
- Articulación del pulgar
4. Articulaciones esféricas (enartrosis)
Brindan la mayor libertad de movimiento, permitiendo todos los tipos básicos. Ejemplos:
- Hombro
- Cadera
5. Articulaciones planas (artrodias)
Permiten principalmente deslizamiento o movimientos muy limitados. Ejemplos:
- Articulación entre los huesos del carpo y del tarso.
La importancia de los movimientos articulares en terapias naturales
El estudio de los movimientos articulares resulta fundamental para el osteópata o terapeuta manual que busca restaurar el equilibrio del cuerpo y mejorar la funcionalidad motora.
Comprender cuáles movimientos realiza una articulación y sus limitaciones permite identificar:
- Áreas con restricciones de movilidad.
- Posibles compensaciones musculares o articulares.
- Factores que contribuyen al dolor o inflamación.
Las técnicas naturales empleadas dentro de la osteopatía, la kinesiología o la fisioterapia, incluyen movilizaciones articulares guiadas que pueden ayudar a recuperar la movilidad perdida y equilibrar la tensión de los tejidos.
Además, ejercicios terapéuticos específicos, que respetan los
